Existen multitud de libros donde las flores tienen un papel destacado, de una manera u otra, como por ejemplo en obras como El perfume, El nombre de la rosa, El Principito, La Dama de las Camelias, etc.
Si nos detenemos en esta última de Alejandro Dumas, “La dama de las camelias”, María Duplessis, alérgica al perfume de las flores llevaba camelias por considerarse la flor sin fragancia.
Representa la hermosura y el arrepentimiento y es una flor que prácticamente no tiene fragancia. La Camelia florece entre los meses de diciembre y mayo. Su planta desarrolla abundantes flores de gran tamaño y de distintos tipos, en función del número de pétalos.
El genérico Camelia tiene unas ochenta especies diferentes y el abanico de colores va desde el blanco más puro y luminoso al rojo carmesí.
Sus brillantes hojas perennes de color verde satinado y dentadas hacen que permanezca vistosa todo el año, aunque, como hemos mencionado, su floración se dé entre finales del invierno y principios de la primavera.
Como nota curiosa comentar que de la Camelia sinensis se obtiene el té.
Aunque principalmente se cultiva en Galicia, por el tipo de clima húmedo y no tiene prisa en florecer, esta es una de las flores más bellas que puedes llevar a casa durante esa época del año. De hecho, Tour Galicia ofrece rutas guiadas sobre las Camelias.
La gran variedad de flores simples, semidobles, en forma de anémona, peonía, rosa, irregulares, convierte a las camelias en una especie muy decorativa en cualquier lugar.
En mayoflor.com podrás encontrarlas para así decorar tu casa con colores bonitos en la época más fría del año.