Orquídeas. Compra y cuidados de orquídeas en casa

La orquídea phalaenopsis es una de las orquídeas más bellas y admiradas en todo el mundo. Existen de muchos colores con unos tonos increíbles pero las que más se compran son la blanca, malva y rosa.

Seguro que muchos de vosotros habréis comprado una orquídea para casa o recibido una como regalo en algún momento.

Nuestras orquídeas son siempre de 2 tallos y 65-75 cm de altura y cuidamos que siempre sea de productores de reconocido prestigio para que su duración sea la más larga posible.

Su cuidado no es difícil, tal y como se piensa equivocadamente, queremos daros unas simples recomendaciones para que disfrutéis de esta variedad durante mucho tiempo y sin demasiado sacrificio.

 

Floración de la orquídea

En condiciones favorables las phalaenopsis viven entre 3 y 7 años, floreciendo dos o tres veces al año.  Su floración es muy duradera, dos o tres meses después que da comienzo la floración.

Se debe ir quitando las flores según se van marchitando.  Una vez todas las flores estén marchitas, es recomendable la poda, recortando el tallo por encima de la tercera o cuarta yema, contando a partir de la base de la tierra, de ahí empezará a brotar otro pedúnculo.

Un momento crítico para la planta es cuando los botones florales están hinchados, a punto de abrirse. Es conveniente no estresar la planta es esos días con cambios de ubicación, temperatura o humedad. Cualquiera de esos cambios puede conducir a la caída prematura de los botones, sin llegar a florecer.

 

Temperatura y Humedad

orquidea blancaA las orquídeas phalaenopsis no le gustan las temperaturas extremas ni las corrientes de aire. Al contrario, se encuentra muy a gusto en sitios con buena luz y humedad.

En circunstancias normales bastaría regarlas una vez por semana en invierno, aumentando la frecuencia en primavera y verano. La clave es evitar que la tierra llegue a secarse, sin tenerla siempre encharcada.

El agua de riego será mejor cuanto más natural. Si la del grifo es demasiado calcárea se puede recoger la de lluvia o utilizar un agua mineral neutra. Si el agua nos llega muy clorada podéis dejarla reposar varias horas y luego regar. Debe estar a temperatura ambiente.

Hay que regar sin mojar las hojas ni el centro de la planta. No se debe dejar agua estancada en el centro de las hojas, ni las raíces continuamente encharcadas, reconocibles por un color verde intenso. Tampoco es conveniente dejar agua en el plato.

Deberíamos tener especial precaución con la calefacción durante los meses de invierno. La orquídea podría encontrarse con un ambiente más seco, lo que podría perjudicarla. Se pueden vaporizar de vez en cuando. Otra forma de facilitar el grado de humedad adecuado podría ser colocar varias plantas juntas, así ellas crearan el microclima adecuado.

 

Cualquier duda que tengáis sobre esta planta nos la comentáis y estaremos encantados de daros un respuesta.